Una mirada para Sultana

En compañía de su hermana, el viernes 30 de mayo llegó a Zaragoza la activista saharaui Sultana Khaya para participar en las II Jornadas de Derechos Humanos, organizadas por la Asociación UM DRAIGA de Amigos del Pueblo Saharaui en Aragón en colaboración con el Ayuntamiento de Zaragoza. Sultana trasladó el testimonio real y directo de las sistemáticas violaciones de los derechos humanos que sufre la población saharaui por parte de las autoridades marroquíes en el Sahara Occidental ocupado. Esta joven, nacida en Bojador y estudiante en Marraquech (los estudiantes saharauis se tienen que ir a Marruecos si quieren continuar su formación, ante la falta de centros académicos superiores en los Territorios Ocupados), explicó la agresión que sufrió el 9 de mayo de 2007, cuando se encontraba participando en una protesta pacífica en solidaridad con los estudiantes saharauis de Agadir. Los 500 estudiantes saharauis fueron rodeados por 700 policías y como consecuencia de los golpes de la policía ella perdió el glóbulo ocular, desprendiéndose de la propia cuenca del ojo (“aini maxaat --mi ojo se fue--”). El relato de las torturas no acaba ahí si no que se prolonga en el interior del la ambulancia que la recogió, donde el conductor incitaba a los policías para que la golpeasen, en la comisaría y en los hospitales a los que la trasladaron. Con posterioridad, Sultana y varias decenas de sus compañeros fueron condenados a prisión, aunque no llegó a ingresar en la cárcel gracias a la presión internacional. Finalmente consiguió salir al extranjero gracias a la embajada sueca. Su caso figura en el último informe de violaciones de derechos humanos publicado por Amnistía Internacional. En la actualidad se encuentra en España, participando en conferencias sobre la situación del Sahara Occidental y recibiendo tratamiento médico en Barcelona, pero piensa volver al Sahara próximamente. Sultana tuvo ocasión de contar su experiencia personal y la situación que viven los saharauis en los Territorios Ocupados por Marruecos en las Cortes de Aragón, donde fue recibida junto a miembros de UM DRAIGA, el representante del FRENTE POLISARIO en Aragón y a varios de los ponentes de las jornadas. El desgarrador testimonio de Sultana, que ella cuenta con estoicismo, conmovió a cuantos la escucharon los días que estuvo en Zaragoza (parlamentarios, periodistas o el público que asistió a las jornadas). En sus intervenciones agradeció el recibimiento recibido, recordó que la resistencia de la Intifada Saharaui es una lucha pacífica contra la ocupación marroquí del Sahara, enfrentándose a todo tipo de unidades militares, policiales y servicios secretos marroquíes que tienen por único objeto apagar la resistencia, por último, hizo énfasis en la necesidad de enfrentarse al bloqueo de Marruecos que impide a los observadores y periodistas internacionales actuar libremente en el Sahara Occidental ocupado.